jueves, 25 de junio de 2020

Maniquí


Maniquí que has observado
mis horas en diez años
Poeta de locura y calma.

La música entona
una historia por vivir
Nuestras líneas
solo recitan
el amor que reviví.

Protector por vocación,
amor de cuentos por
consecuencia.

Que tu don sirva
a todo el que se asfixia
Y que tu vida se quede
en estas horas de mi día.

miércoles, 24 de junio de 2020

Amor de dos ángeles de Mundos distintos


Dios ama a todas sus criaturas
Hay un ángel que ama con celo,
le da la libertad de amar y la del consuelo
Este ángel se ha enamorado.

El ángel tiene luz, vida
y al que ama, atado se encuentra
Ella lo visita con sigilo y precaución,
pues donde él estaba, eran penumbras.

Los años de visita le han curado
las heridas de sus cadenas
Este ángel oscuro, que ama
el ángel de luz,
ahora suspira.

Sueña con ir al paraíso,
besar al ángel que ha cuidado
de él.

De su cautiverio escapó
solo para proteger a su ángel de luz
Dios lo sabe bien,
y los observa, y los bendice.

El amor de dos ángeles
de distinto cielo,
distintos mundos.

Meylen Hirasú G. M.
#PoetMey
#PoetisMeylen


jueves, 18 de junio de 2020

TicTac


Si hay días en que de escribir
decido por completo inhibir,
no es que decida refutar
de mi ya obvia vocación.

Yo consuelo mi ansiedad,
en un eufórico vals
que marca el tictac
de un tiempo perfecto.

Quizá suene ruidoso,
tal vez agotador,
las rimas que de mi euforia
se derraman en esta hoja.

Pero no siempre se piensa
en la métrica del habla
El alma a veces,
solo expresarse, anhela.



domingo, 14 de junio de 2020

Un Mundo Mejor (cuento)


Estamos hace meses encerrados en esta clínica. La mía es la R56. Es una de las treinta que hay en mi estado. Todo es muy desesperante. Pensamos que al encontrar la vacuna del virus que acabó con gran parte de la humanidad, todo volvería a la normalidad.

Muchos tuvimos crisis. Fueron diez meses los que nos pidieron estar encerrados en nuestras casas. Por no hacer caso ahora estamos encerrados lejos de nuestros hogares. Hace tres meses que no veo a mi familia, no sé de algún amigo, nadie. Aquí comemos por horarios en grupos de cinco personas. Yo como con Laurel, Ramón, Sandra y Uriel. Ellos tampoco han visto a nadie de los suyos.

Cuando recién inició la llamada cuarentena en los primeros países, permanecimos mes y medio, quizá dos, encerrados. Pero después fuimos desobedientes a nuestras autoridades. Por supuesto que los países de tercer mundo no íbamos a poder estar encerrados por meses, como los de primera. Necesitábamos trabajar para tener ingresos. Pero aún así no se tomaron las medidas correspondientes.

Nuestros gobernadores, no todos, pero sí los hubo, fueron irresponsables e ignorantes en cuanto a las medidas para enfrentar este virus. Nuestras clínicas estaban repletas de pacientes con el Virus, y la mayoría de las personas que se nos fueron, fue a causa de esta enfermedad. Una epidemia letal. De un día para otro a nuestros seres queridos nos los entregaban en cenizas. Ya no nos despedíamos de ellos. Era más doloroso.

Fue un año muy duro para la humanidad, pero para el resto de la naturaleza fue un año glorioso. Los animales volvieron a disfrutar de su hábitat. El mundo respiró, la contaminación disminuyó. Solo un par de meses bastó para que el mundo regresara a la vida.

Se halló la vacuna al fin, pero los sabios recomendaron a los líderes encerrarnos a todos en clínicas. Nos hacen pruebas, somos experimentos para sanar a los animales, para recuperar las especies en extinción. Y nosotros encerrados en todo el mundo, el mundo sigue respirando.

El cáncer disminuyó, las gripes. No ha habido ningún virus nuevo. Creo que encerrados estamos mejor. El mundo necesitaba respirar, vivir, y nosotros con nuestra soberbia lo teníamos muy enfermo.

Este es el nuevo mundo. Un mundo bello, y no podemos disfrutarlo. Ahora somos la humanidad los que estamos encerrados, cautivos. Sin la libertad de disfrutar a la naturaleza, pero es ésta misma la que ahora es libre. 

viernes, 12 de junio de 2020

Culpables


Si por frágil y astuta
me considera usted
indigna del bello arte,
para condenar, 
no está a la altura.

Nos condenan y amenazan
sin compasión sublime,
cuando es culpable usted
como yo, al intentar desear.

Quizá más lo sea yo
por consentir su sutileza
que con astucia me convenció.

¡No respire la pureza
de esta alma con sueños!,
pues sabe escapar a
menudo de toda desgracia. 

#PoetMey


miércoles, 10 de junio de 2020

Besos de Incendio

Antes de ese cielo estrellado no nos habíamos visto Antes de esa danza exquisita nunca había tocado un alma desnuda.
Tus besos de incendio quemaron el césped de una inocente poetisa.
Yo solo actuaba el libreto de tu pasión Tu cuerpo y el mío cantaron con emoción.
Y siendo de metal, el riff no fue calmado Fue una explosión que nos elevó en el solo de antaño.
Yo fui una guitarra en tus manos ansiosas Tocaron mis curvas y entonaron mi canto.
Tu boca marcó el éxtasis de letras ocultas.
Tu mirada encendió la locura de un espíritu dulce.
Y cuando tu cuerpo era uno con el mío de inmediato desperté.
Mi cama estaba vacía y tú, a cientos de kilómetros, terminabas tu jornada.
Una lágrima cayó y volví a dormir, mas ya no recuperé la escena de pasión en la que actuábamos.


viernes, 5 de junio de 2020

Sincero Te Quiero

Hay unas manos
dispuestas a escribir
Hay un silencio
a punto de morir.

Una añoranza
de rizos costeros
y un sincero te quiero
guardado en mi boca.

Se oyen murmuros,
mis letras te gritan
Tú eres a quien amo.

Tus ojos recitan
y pintan murales
que yo solo deseo.

Meylen Hirasú G. M. 

martes, 2 de junio de 2020

Ensalzada

Ensalzada de tus cumplidos
me marino en letras,
acordes y cantos atentos,
que guardan el silencio
de una dama que no quiere
más herir.
 
Estas manos que
se complacen en
escribirte ahora,
en esta tarde que
termina para iniciar
la noche del suspiro,
no les importa
más que complacer
el alma que se place
en recitar.
 
Grandes estrofas
de deseos
surgen a esta hora
de este martes,
en un año de óbito,
que entristece esta alma.
 
Pero es tu elogio,
es tu respeto,
tu porte y tu gusto
al arte,
los que me alegran
ya las horas
en que escucho
tu muda voz.
 
Dame, dame, oh,
amigo
la confianza de decir:
Te quiero,
con respeto,
sabiendo que no
te he de lastimar.
 
Bailemos estas
líneas,
cantemos este palpitar,
que en encierro
nos inspira,
que en el aire nos
hará volar.


Ausencia

  Mis palabras se mudaron o tomaron, quizás, vacaciones Las notas de todas las canciones sin razón ni excusa desafinaron. Mi voz y respiraci...