Estamos en el algodón del cielo,
sentados sobre
azúcar esponjosa
Estamos bañados de
la brisa
que nos arrebata el
miedo.
Somos un entero
que se hizo de mil
palabras
Somo la poesía
que conforma un solo
verso.
Y te veo tan
perfecto,
intacto de basura,
que sonrío sin
pensarlo.
Y te amo tan ameno,
con el alma entera,
que de aquí, ya no
me muevo
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