¿Cuánto
debo hacerte esperar?
¿Cuánto
tiempo es suficiente?
Nuestra
ilusión ¿es coherente?
No
he podido dejarte de amar.
La
vida es un vaso de licor,
el
mejor vino, el más suculento
Y
hemos bebido sorbos, ya
Para
eso se nos dio esta copa.
Pero
han sido tragos amargos
lejos
de ti
Demasiado
añejo o muy empalagoso,
nunca
es como lo deseo.
Y
siempre vuelvo a tu viñedo,
a
tu copa y a tu licor,
porque
aunque eres mi primer trago,
sigues
siendo el mejor.
Me
embriagué de tus uvas,
de
tu fermentación y experiencia
Y
ningún otro vino ha logrado
embrutecer
mi esencia.
No
quiero que esperes más,
vuelve
a saciar mi sed
Sé
el festejo de mis metas,
el
estímulo de continuar.
Ya
no esperes, aquí estoy
Acompaña
mi cena y desayunos
Sé
mi almuerzo y postre.
No
esperes más.
Meylen Hirasú G. M.
No hay comentarios:
Publicar un comentario