Si tus dedos moldean tan bellas historias, fascinantes
dramas y exquisitas poesías, yo quiero ser el comensal que deguste tu menú literario
cada día de tu vida.
Si tus hilos forman tan bellas mantas de ilusiones que
cubren mi piel en las noches de invierno mientras recuerdo realidades ficticias
que quedaron en algún ayer, yo quiero ser tu industria textil.
Si esas tus letras que llueven en primavera, me empapan de
tanta dulzura, emoción y excitantes historias donde somos protagonistas, yo
quiero ser siempre tu prosa.
Si eres el muso prohibido, el que no debo atender en horas
de inspiración
Si eres el poeta que la poetisa ama en secretos a gritos
Si eres la ilusión, la fantasía, el NO de la vida de esa
poetisa que llora al verte y no poder besarte
Si eres la esclava de oro que ya no alcanza aquella a tomar
entre sus manos,
entonces déjala ser la amante de tus letras y
amiga de tus días.
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